El agro seguro
Según el año, existen fenómenos naturales que provocan disturbios o tranquilidad en el medio ambiente. El año 2022 se caracterizó por una fuerte sequía en todo el país. Los productores del agro sufrieron importantes pérdidas al no tener agua para destinar como riego o alimento para los animales. Los seguros prevén situaciones climáticas y económicas para proteger lo más preciado que puede tener un productor, su tierra.
El fenómeno climático La Niña se identificó por las altas temperaturas y la disminución de lluvias. Las variaciones bruscas de tiempo también formaron parte del año 2022 en el ambiente agro, una época que muchos prefieren olvidar pero que aún están recuperándose de la fuerte caída de producción.
Este año se espera el fenómeno denominado El Niño, se caracteriza por sus fuertes y constantes lluvias, aunque en algunos sectores podría combinarse con los efectos del cambio climático y mantener las altas temperaturas durante la época de verano.
Pese a la incertidumbre, los seguros proponen diferentes coberturas para adaptarse al cambio climático del mundo y la inestabilidad económica que podría provocar el mismo. Los cultivos extensivos, intensivos, florales y forestales necesitan seguros puntuales para estar protegidos de cualquier contratiempo. Lo mismo sucede con el ganado, el patrimonio, maquinarias y los trabajadores que se desempeñan en el campo.
Los seguros fragmentados son los más solicitados en la industria. Empresas como el Grupo Sancor Seguros, ofrecen una línea de protección para el agro con la particularidad de sectorizar los riesgos a fin que el cliente tenga acceso a pagar solo por los elementos y servicios que necesita asegurar. De este modo se reduce la cuota mensual y en caso de pérdida, incluso por factores climáticos impredecibles, tiene la tranquilidad de recibir la suma pactada al inicio de su contrato.
El clima es cambiante, la economía puede pender de un hilo, pero un seguro es una tranquilidad para proteger lo más valioso, en este caso el trabajo.