Vamping en adolescentes. Conocimiento y desafíos
Podríamos asociar el término vamping a vampiro, es correcto pero no solo se trata de esa definición. El vamping es un fenómeno tecnológico que afecta a personas de todas las edades pero está presente, en mayor medida, dentro de la comunidad adolescente. De qué se trata y como ayudar a las personas que transitan por este fenómeno.
Según la Organización Mundial de la Salud, para que los niños menores de 5 años crezcan sanos deberán pasar más tiempo parados jugando que sentados frente a una pantalla. También aporta datos sobre el sedentarismo en personas adultas y su consecuencia, actualmente el 23% de los adultos y el 80% de los adolescentes no realizan la suficiente actividad física. Esto provoca más de 5 millones de muertes al año, a nivel global.
El vamping es la acción de utilizar dispositivos electrónicos antes de dormir y durante toda la noche. Se considera que no respetar horarios de descanso puede provocar problemas en el organismo y alteraciones en la vida cotidiana. Si bien el vamping es un fenómeno que no tiene edad, los adolescentes podrían ser los más afectados.
¿Cómo afecta el vamping en los adolescentes?
Al estar conectados por la noche, se pierden horas de sueño, en consecuencia baja el rendimiento escolar y aumenta la ansiedad. También se puede producir lo que hoy llamamos una “nomofobia” considerado como el miedo a vivir sin herramientas de conexión digital pudiendo provocar aislamiento y problemas físicos como el dolor de cabeza.
Dentro de una rutina llena de obligaciones y cansancio, controlar el nivel de consumo digital podría ser una tarea difícil para los padres de adolescentes, sin embargo existen algunas claves para reducir el tiempo de pantalla y, en consecuencia, disminuir la ansiedad que esto genera.
Claves para reducir el vamping
- Si se trata de un adolescente, se podrían establecer reglas en el uso del celular. Puede ser a través de horarios;
- Apagar las notificaciones del teléfono, podría evitar la distracción y la tentación a ver un mensaje y quedarse horas interactuando;
- Dormitorios no digitales, se trata de no tener dispositivos que podrían causar insomnio o ansiedad.
El “último vistazo” antes de dormir podría ser el comienzo del vamping, en caso de tener inconvenientes para dejar de depender del celular es recomendable hablarlo con amigos y conocidos para una primera ayuda y luego consultar con un profesional de la salud quién sabrá asesorar de la mejor manera y tener descansos profundos para optimizar la jornada diaria.